Imagen cortesia de Pinterest
Es costumbre tomar unos días libres para descansar o escaparnos a la playa para sacar provecho al máximo del verano, exponiendo nuestra Piel y Cabello al sol, arena, agua salada y otros factores externos que suelen afectarnos considerablemente. A pesar de que tomemos medidas para disminuir los efectos de daño a nuestra piel o cabello, nunca será completamente suficiente. Por ello luego de disfrutar estos días de relax, incluso así no hayas viajado, estos tips que te daremos a continuación también te ayudarán a renovarte para empezar nuevamente la rutina luciendo espectacular y/o aplacando los daños secundarios provocados por el ambiente (resequedad, maltrato, decoloración, etc).
- Hidratación: Para la piel y el cabello te recomendamos principalmente mucha hidratación, toma abundante agua, así como también puedes ingerir ciertas vitaminas como la A y la E, estás ayudan considerablemente a renovar nuestra piel ofreciendo los nutrientes necesarios, mejorando la formación de células y protegiendo la piel de los rayos solares para que está no siga deteriorándose. La hidratación debe ser contante, si es posible diariamente.
- Humectación: son las sustancias que absorben o ayuda a retener la humedad, lo podemos encontrar en cremas corporales que venden en tiendas. Existen una gran variedad de opciones con diferentes componentes que se pueden adaptar a nuestras necesidades y tipo de piel. Siempre busca que la crema que vayas ha adquirir tenga protector solar para un mejor cuidado de la piel. Debes humectar la piel por lo menos 3 veces al día, por un mes.
- Disminuye los baños: No te bañes con mucha frecuencia, tu piel y tú cabello quedan sensibles luego de ser expuestos a diferentes factores por lo que si puedes utiliza jabones y champú especiales que no contengan tantos químicos y sean lo más natural posible. Siempre busca los jabones que contienen la suficiente cantidad de aceites esenciales naturales como el aceite de aguacate, aceite de jojoba, aceite de lavanda, manteca de cacao, aloe vera y varios otros aceites vegetales, que son realmente maravillosos para la piel. Mientras que para el cabello puedes optar por un champú y acondicionadores sin sal, por lo menos por un pequeño periodo de tiempo que puedas notar los cambios favorables en tu hermosa cabellera.
- Usa tratamientos caseros: usa 2 o 3 veces a la semana hidratantes caseros, acá te dejamos algunos.
Para la piel:
Preparación: Tritura el banano, agrégale la miel y el limón, y mézclalos muy bien hasta que se conviertan en masa. Aplícate la mezcla durante 15 minutos una o dos veces por semana, en la mañana o antes de dormir. Verás que tu piel se hidratará al máximo.
Otros tratamientos para la piel:
Para el cabello: El aguacate es rico en grasas que hidratan el cabello. Pela un aguacate que esté bien maduro, agrégale una cucharadita de aceite de germen de trigo y una cucharadita de aceite de jojoba. Combina todos los ingredientes.
Aplica después del champú, empezando por el cuero cabelludo y dándote masaje hasta llegar a las puntas. Ponte una gorra de plástico y déjalo actuar por 10 ó 15 minutos.
- Consume frutas hidratantes, proteínas, vitaminas y mejora tu alimentación, la renovación viene desde adentro. Puedes incluir en tu consumo diario la piña, patilla, naranja, melón, limón, kiwi, aguacate, fresa, cambur, etc.
Por amorymoda.com
