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Nuestros zapatos son nuestra prenda más apreciada y ocasiones una de las más costosas, son los cuidan, cubren, protegen nuestros pies amortiguando cada una de nuestras pisadas. Sin mencionar que son los cómplices de muchos de nuestros fabuloso look, de modo que no debemos permitir que estos se dañen por simples descuidos que podemos evitar a tiempo.
Por lo regular nosotras las mujeres tenemos una gran variedad de zapatos para cada eventualidad y a pesar de la cantidad todos son muy importantes. Cada calzado tiene un periodo de vida determinado, puede variar de acuerdo al uso y el material del cual este constituido. No obstante, el cuidado que le ofrecemos a estos también influyen de gran manera, por lo tanto pon atención a estos 10 errores más comunes que acostumbramos a cometer cuando se nos daña una de nuestros preciados zapatos.
1. NO al desorden: mantén cada par bien organizado y separados unos del otro.
2. OJO con el mantenimiento: cuando vayas a limpiarlos fíjate bien del material, ya qué hay algunos que no toleran el agua o el jabón y pueden dañarse inmediatamente. Existen otras alternativas para limpiar nuestro calzado que podemos tomar en cuenta de acuerdo al material del mismo. Usa las herramientas adecuadas.
3. Cuidado con la lluvia: evita lo más que puedas mojarlos, sobre todo si son de tela o un material frágil.
4. No los dejes mojados: si se te mojaron, asegúrate de secarlos bien con un poco de sol o un secador.
5. Evita ensuciarlos o encharcarlos: ten cuidado donde pisas.
6. No lo uses tan seguido: alterna el uso de los zapatos para evitar desgaste del mismo.
7. No los prestes: nadie cuidara tus prendas como tú.
8. Usalos correctamente: ya sabes, si vas a correr o hacer ejercicio usa el tipo de zapato adecuado, recuerda que existe un par para cada exigencia y cada ocasión.
9. Si ya están rotos NO LOS USES: puedes optar por arreglarlos pero si no, no es bueno que los uses, te pueden dejar mal en la calle.
10. Revísalos continuamente: chequea siempre que estén en buenas condiciones y si es necesario llévalos a un zapatero.
El tiempo de vida de tus zapatos dependen del cuidado que les puedas ofrecer, así que ya sabes, no dejes que se te dañen.
Mirialbert Aguilar
